Ya hace unos años que los dispositivos mobile, especialmente los teléfonos, están cobrando cada vez más relevancia. Por esto, es importante no solamente pensar una web para mobile, sino también los contenidos que publicamos.
Mobile está ganando terreno por dos razones:
- Muchas personas tienen un teléfono y no una computadora. Puede ser por una razón económica, pero también por elección. Hay gran cantidad de personas que por desconocimiento de la tecnología o por una llegada tardía, les resulta menos abrumador familiarizarse con el teléfono que con una computadora de escritorio o incluso una laptop.
- El mobile lo llevamos con nosotros todo el tiempo a todos lados. Incluso cargando una laptop durante toda nuestra jornada, no la podemos consultar el 100% del tiempo, en cambio el mobile prácticamente seguro que sí. En el viaje en colectivo, o subte, o esperando que nos atiendan, o llegue nuestra cita, mientras comemos o lo que sea que estemos haciendo, podemos sacar el teléfono.
Esto junto al desarrollo de los dispositivos en sí, tanto desde el punto de vista tecnológico como de oferta de aplicaciones y recursos disponibles para usarse en mobile, hace que mobile le siga ganando terreno a las computadoras de escritorio.
En ese camino, es perfectamente razonable si tenemos un sitio web, una tienda de e-commerce, o cualquier otra plataforma web, la adaptemos y mejoremos pensando primero cómo va a verse y funcionar en mobile.
Pero, ¿cuántas veces pensamos “mobile first” cuando hablamos de contenidos? Las imágenes para las redes sociales, el largo de los textos o los párrafos, la longitud y estructura de los videos, etc. No todo acaba con la usabilidad de las plataformas en sí. También a la hora de producir contenidos hay que pensar en cómo va a responder este contenido cuando sea consumido en un dispositivo mobile.
Videos (especialmente para Youtube), stories en Instagram, fotografía en Instagram o Facebook, podcasts, blogs cortos, son los contenidos que hoy en día están siendo consumidos por toneladas en dispositivos mobile.
Un caso concreto son las publicaciones en Instagram. La plataforma nos permite publicar imágenes de cuadradas, o rectángulos horizontales o verticales. La publicación más clásica es la cuadrada, 1×1, es la que por defecto recorta la aplicación a la hora de publicar.
Ahora, si en lugar de publicar así, aprovechamos el máximo (4×5 vertical) veremos que la imagen ocupa el total de la pantalla de un teléfono en el feed. Esto va a obligar a la persona a que en el momento de estar desplazándose entre diferentes posteos tenga que focalizar su atención en la nuestra. Este es un ejemplo claro de pensar contenidos para mobile.
Otro caso se da en las stories. Cada vez son menos los que publican videos, fotos o diseños horizontales, pero aún muchos caen en la trampa. Si todos consumimos las stories (por la propia experiencia de la aplicación) con el dispositivo mobile vertical, si mi contenido está dispuesto horizontalmente, la persona tiene que voltear su dispositivo. Ese esfuerzo extra hará que la persona simplemente siga adelante y no nos preste atención.
Es importante a la hora de producir que tengamos en cuenta si el contenido se va a consumir fácil y bien en mobile. Es donde más tiempo tus usuarios pasan. No lo pierdas de vista.
Si tenés problemas con tus contenidos o querés mejorar tu estrategia de marketing digital no dudes en escribirnos para que podamos guiarte.